jueves, 27 de octubre de 2016

Little Tibet

Es como se conoce a Ladakh o "tierra de los pasos altos", en el nordeste de la India, frontera con el otrora Tíbet (ahora China a la fuerza) y vecina de la famosa y tan contestada región de Cachemira. Aquí hay sobre todo montañas, monasterios y monjes budistas. Vegetación poca y fauna menos.





Hace 20 años aquí sólo se accedía en avión, excepto en los meses de invierno en que la región permanecía aislada. En aquellos tiempos sus habitantes vivían en las más feliz y absoluta autarquía: producían todo ellos mismos, lo justo y necesario para sobrevivir el invierno, todos trabajaban (el tan ansiado desempleo cero), todos tenían una casa (amplia y compartida por la familia extendida), y todo el mundo disfrutaba de suficiente tiempo libre para compartir entre familia y amigos y para reír.







Y entonces llegó la Globalización. El gobierno Indio subvencionó la construcción de carreteras, con materiales subvencionados traídos desde otras regiones de India por camiones que consumen gasolina también subvencionada. El pequeño Tíbet quedó expuesto al mundo global y llegaron los cambios: camiones cargados de productos también subvencionados que competían con los locales; llegaron los "rol models" occidentales a los que todos los jóvenes comenzaron a idolatrar y querer imitar; llegaron el consumismo y materialismo típicos de nuestro mundo global; llegamos los turistas...

Ahora la sociedad Ladakhí se debate entre el tan ansiado equilibrio entre tradición y modernidad, libertad y regulación, lo global o lo local, una vida simple y una vida llena de interminables y crecientes. Hay una organización que tiene una propuesta para tratar de lograr eses equilibrio: the Economics of happiness:


Quizás esta "localización" ayude a recuperar los índices de felicidad y de empleo anteriores a la globalización para los Ladakhíes.